Fuentes médicas palestinas informaron de que al menos 50 palestinos, entre ellos 11 niños, resultaron heridos en ataques israelíes contra palestinos en toda Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Oriental.
Los israelíes atacaron a los palestinos mientras organizaban sus protestas semanales contra los asentamientos en Qalqilia, Kafr Qadoum y Beit Dajan.
Según las fuentes, las fuerzas de ocupación israelíes dispersaron las protestas utilizando munición real y botes de gas lacrimógeno.
Mientras tanto, las fuerzas de ocupación israelíes abrieron fuego contra los fieles palestinos en los alrededores de la Mezquita de Al-Aqsa y la Ciudad Vieja de Jerusalén, así como en los pueblos cercanos a Ramala.
Las fuentes médicas dijeron que la mayoría de los heridos sufrieron inhalación de gas y fueron tratados en el campo.
Al mismo tiempo, decenas de colonos israelíes se reunieron cerca de las puertas de la mezquita de Al-Aqsa y provocaron a los fieles musulmanes mientras realizaban rituales talmúdicos bajo la plena protección de las fuerzas de ocupación israelíes.
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