España convocó ayer al embajador iraní en Madrid para protestar contra la represión policial de los manifestantes tras la muerte en prisión de una joven de 22 años. El Ministerio de Asuntos Exteriores convocó al enviado para expresar su oposición a la "represión de las manifestaciones y la violación de los derechos de las mujeres". Esto se produjo un día después de que emitiera una declaración condenando "la violencia contra los manifestantes pacíficos" y "la violencia contra las mujeres iraníes y sus derechos".
Tras la muerte de Mahsa Amini en las protestas en Irán han muerto unas 60 personas, además de diez policías. Más de 1.200 manifestantes han sido detenidos.
El lunes, el gobierno alemán convocó al embajador iraní en Berlín, pidiéndole que pusiera fin a la violencia.
La semana pasada, Estados Unidos impuso sanciones a la policía de la moral iraní por las acusaciones de abusos a mujeres iraníes. Washington dijo que consideraba a la unidad responsable de la muerte, el 16 de septiembre, de la mujer kurda de 22 años, Mahsa Amini, después de que fuera detenida por la policía de la moralidad que hace cumplir las estrictas restricciones de la República Islámica sobre la vestimenta de las mujeres.
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