Las fuerzas de seguridad iraníes recibieron la orden de reprimir "severamente" y "sin piedad" las protestas contra el gobierno cuando se extendieron por todo el país el mes pasado, según han revelado documentos filtrados citados por el grupo de derechos humanos Amnistía Internacional.
Según uno de los documentos, obtenido por el grupo a través de medios desconocidos, el 21 de septiembre el Cuartel General de las Fuerzas Armadas ordenó a los mandos que "se enfrentaran con severidad a los alborotadores y antirrevolucionarios", refiriéndose a los manifestantes y a quienes se oponen a la Revolución "Islámica" iraní de 1979 y al gobierno existente surgido de ella.
Unas 34 personas murieron la noche en que se dio la orden, según Amnistía Internacional.
Otro documento filtrado daba, al parecer, una orden aún más directa dos días después, en la que el comandante de la provincia septentrional de Mazandran decía a las fuerzas de seguridad que "se enfrentaran sin piedad, llegando a causar muertes, a cualquier disturbio de los alborotadores y antirrevolucionarios".
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Desde la muerte de Mahsa Amini, de 22 años, mientras estaba detenida por la policía, hace dos semanas, las protestas han estallado en todo Irán y, hasta ahora, se han saldado con la muerte de al menos 52 personas a manos de las fuerzas de seguridad.
Aunque la policía afirma que Amini murió de un ataque al corazón, su familia y los manifestantes insisten en que fue golpeada hasta la muerte por la policía. La dura represión de las fuerzas de seguridad ha consistido en disparar munición real contra la multitud, golpear a los manifestantes con porras y, al parecer, manosear a las manifestantes que se quitaban el pañuelo.
Agnes Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, declaró que "las autoridades iraníes decidieron a sabiendas dañar o matar a personas que salieron a la calle para expresar su ira por décadas de represión e injusticia".
Añadió: "En medio de una epidemia de impunidad sistémica que prevalece desde hace tiempo en Irán, decenas de hombres, mujeres y niños han sido asesinados ilegalmente en la última ronda de derramamiento de sangre."
Aunque el gobierno y el presidente iraníes han dado su apoyo a las fuerzas de seguridad y les han dicho que se enfrenten "con decisión" a las protestas, los documentos filtrados de los que se ha informado serían la primera prueba de una orden directa de usar la fuerza letal contra los manifestantes.
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