El gobierno israelí está estudiando una ampliación de la Ley del Retorno del país para atender a los descendientes de cuarta generación de judíos rusos que intentan huir de la llamada masiva de reservistas por parte de Moscú para apoyar la invasión rusa de Ucrania. El ministro de Finanzas, Avigdor Lieberman, dijo que podría ser una medida temporal.
Según el Times of Israel, Lieberman planteó inicialmente la cuestión durante la reunión del gabinete del domingo, abogando por que esta "cuarta generación" tenga derecho a la ciudadanía de alguna manera. El primer ministro Yair Lapid, según la emisora Kan, dijo que la cuestión debería discutirse más a fondo en un debate interministerial, que se celebró el lunes.
"No proponemos incluir a la cuarta generación en la Ley del Retorno ni darles la ciudadanía automática, sino tratarlos sobre la base de nuestra obligación histórica con los valores humanitarios y judíos", escribió Lieberman en Twitter. "El pueblo judío no dejó de sufrir tragedias y miseria en la Segunda Guerra Mundial, que fue en un momento en que ningún país aceptaba a los refugiados judíos. Esta es la cuarta generación, la de los hijos de los judíos que tienen un claro vínculo con el judaísmo y una conexión directa con sus familias que viven en Israel."
Sin embargo, el ministro de extrema derecha fue criticado por el MK sionista Simcha Rothman. "La Ley del Retorno se promulgó para que Israel fuera un Estado judío", tuiteó Rothman. "Lieberman está trabajando en la destrucción de la identidad judía de Israel".
La mayoría de los emigrantes de Rusia son judíos, pero algunos sólo tienen parientes cercanos que son judíos. Según la Ley del Retorno de Israel, una persona necesita al menos un abuelo judío para tener derecho a la ciudadanía inmediata. Unos 600.000 rusos cumplen los requisitos. La magnitud de la migración parece haber tomado por sorpresa a las autoridades rusas.
Los grupos de derechos humanos destacan regularmente esta política al referirse al sistema de apartheid de Israel contra los palestinos que fueron limpiados étnicamente en 1948 para dar paso a la creación del Estado de ocupación. Se les ha negado su legítimo derecho a regresar a su tierra natal, a pesar de que el cumplimiento de este derecho era una condición para que Israel fuera miembro de la ONU.
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