El gobierno israelí está estudiando la posibilidad de abrir campos de refugiados temporales en Azerbaiyán con los 25 millones de dólares destinados a los judíos rusos que quieran emigrar a Israel, tras la invasión rusa de Ucrania.
Según The Jerusalem Post, el gobierno de Israel aprobó una propuesta, a principios de este mes, para facilitar la inmigración de judíos rusos a Israel, en medio de la mayor ola de emigración rusa a Israel en dos décadas.
Entre los programas previstos en esa propuesta se encuentran los campamentos temporales, creados por la Agencia Judía, en Azerbaiyán para los judíos rusos que deseen realizar el traslado.
Los planes también incluyen la ampliación de la Ley del Retorno del país para atender a los descendientes de cuarta generación de judíos rusos que intentan huir de la llamada masiva de reservistas por parte de Moscú para apoyar la invasión de Ucrania.
La mayoría de los emigrantes de Rusia son judíos, pero algunos sólo tienen parientes cercanos que son judíos. Según la Ley del Retorno de Israel, una persona necesita al menos un abuelo judío para tener derecho a la ciudadanía inmediata. Unos 600.000 rusos cumplen los requisitos. La magnitud de la migración parece haber tomado por sorpresa a las autoridades rusas.
Los grupos de derechos humanos destacan regularmente esta política al referirse al sistema de apartheid de Israel contra los palestinos que fueron limpiados étnicamente en 1948 para dar paso a la creación del Estado de ocupación. Se les ha negado su legítimo derecho a regresar a su tierra natal, a pesar de que el cumplimiento de este derecho era una condición para que Israel fuera miembro de la ONU.
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