El fabricante de cemento francés Lafarge se ha declarado culpable en Estados Unidos de apoyar a Daesh y a otros grupos terroristas en Siria y ha acordado pagar una multa de 777,8 millones de dólares.
Según Reuters, la empresa, que fue comprada por el grupo suizo Holcim en 2015, hizo la admisión ayer en un tribunal federal de Nueva York, por lo que es la primera vez que una empresa se declara culpable en Estados Unidos de ayudar a los terroristas.
Los fiscales habían acusado a Lafarge y a su filial siria, Lafarge Cement Syria, de pagar a Daesh y al Frente Al-Nusra (que desde entonces se ha rebautizado como Hayat Tahrir Al-Sham) a través de intermediarios el equivalente a unos 5,92 millones de dólares entre 2013 y 2014 para seguir gestionando su fábrica y utilizar sus puestos de control.
Esto permitió a la empresa obtener ingresos de 70 millones de dólares en su planta que opera en Jalabiya, cerca de la frontera con Turquía, según la fiscalía.
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Lafarge acabó evacuando la planta en septiembre de 2014, después de que Daesh tomara el control de la ciudad y de la fábrica y la vendiera por el equivalente a 3,21 millones de dólares.
"Lafarge hizo un trato con el diablo", dijo Breon Peace, el principal fiscal federal de Brooklyn, a los periodistas tras la declaración de culpabilidad. "Esta conducta de una corporación occidental fue atroz y no tiene precedentes ni justificación".
En un comunicado, Lafarge dijo que había "aceptado la responsabilidad por las acciones de los ejecutivos individuales involucrados, cuyo comportamiento fue una violación flagrante del Código de Conducta de Lafarge. Lamentamos profundamente que se haya producido esta conducta y hemos trabajado con el Departamento de Justicia de Estados Unidos para resolver este asunto".
Tras la sentencia judicial estadounidense, un legislador francés ha criticado la inacción de las autoridades francesas. "Estados Unidos ha sancionado a Lafarge por financiar a Daesh. ¿Y Francia?" se preguntó Clementine Autain en Twitter, añadiendo que había apelado al Gobierno sobre el tema "tantas veces" pero que sus esfuerzos fueron "en vano". Autain añadió que "el silencio y la inacción son culpables".