Miles de jordanos asistieron el viernes a una multitudinaria marcha organizada por el movimiento islámico en Ammán para mostrar su apoyo a la resistencia palestina en la Cisjordania ocupada, informó Quds Press.
La marcha conmemoraba el 105º aniversario de la Declaración Balfour británica, que prometía establecer un Estado judío en la tierra de Palestina.
Los manifestantes condenaron la Declaración Balfour y deploraron la indiferencia árabe e internacional hacia la causa palestina, Jerusalén y la mezquita de Al-Aqsa.
También condenaron la indiferencia ante las agresiones diarias llevadas a cabo por las fuerzas de ocupación y los colonos israelíes contra los palestinos, sus propiedades y los lugares sagrados.
Quds Press informó de que los organizadores llamaron a la marcha "Gratitud a los leones de Cisjordania y a los mártires".
Los manifestantes instaron al gobierno del reino hachemita a cortar sus relaciones con la ocupación israelí, subrayando que era el momento de mostrar su solidaridad con Jerusalén y la mezquita de Al-Aqsa.
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Mientras tanto, expresaron su solidaridad con la resistencia palestina en Gaza y los residentes del enclave costero asediado.
Los organizadores de la marcha expresaron que ésta pretendía enviar un mensaje de apoyo y solidaridad a los palestinos de Gaza, Hebrón, Nablus, Jenin, Jerusalén y todas las ciudades palestinas sometidas a los "brutales ataques diarios de Israel".
El observador general de los Hermanos Musulmanes en Jordania, Abdul Hamid Al-Thneibat, explicó: "Esta marcha refleja el rechazo del pueblo jordano al reconocimiento de la legalidad de la Declaración Balfour y la legitimidad de su resultado: la creación del Estado de ocupación".
Al-Thneibat añadió: "Palestina es un país islámico y árabe y lo seguirá siendo siempre".