La Fiscalía argelina solicitó el sábado la pena de muerte contra más de 70 personas acusadas de torturar a un hombre, quemarlo vivo y mutilar su cuerpo el 11 de agosto de 2021 en la región de Cabilia, tras acusarlo erróneamente de provocar un incendio, según los medios de comunicación locales.
Los acusados de asesinar a Jamal Ben Ismail están siendo juzgados en Argel por "cometer actos terroristas y subversivos contra la seguridad del Estado y la unidad nacional" y "participar en el asesinato deliberado y deliberante".
Otros 25 acusados también están siendo juzgados en el caso y la Fiscalía solicitó que se les impusieran penas de diez años de prisión tras acusarles de "reunión armada" y de "sembrar el terror entre la población y crear una atmósfera de inseguridad" al fotografiar el crimen y mutilar el cuerpo del muerto, y publicar fotos y vídeos de esta brutalidad".
Jamal, de 38 años, acudió voluntariamente al distrito de Larbaa Nath Irathen, en Tizi Ouzou, en el noroeste del país, para ayudar a apagar los incendios forestales que mataron al menos a 90 personas en una semana. Entonces se enteró de que algunos residentes sospechaban que estaba implicado en el inicio de los incendios porque era un extraño en la región, por lo que se entregó a la policía.
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Los vídeos difundidos en las redes sociales muestran a la multitud rodeando el coche de policía en el que viajaba Jamal y muestran cómo lo sacan a rastras del coche y lo golpean.
Durante el juicio, que comenzó el martes, se mostraron vídeos que los acusados habían publicado en las redes sociales en los que se veían detalles de los crímenes. Las imágenes muestran cómo Jamal fue torturado, quemado vivo y le robaron sus objetos personales, incluido su teléfono móvil.