El embajador de Brasil en Palestina, Francisco Mauro Holland Brasil, presenció ayer el partido de fútbol de la Copa Mundial de la FIFA entre su selección y Suiza en un campo de refugiados palestinos en Rafah.
El embajador decidió sentarse entre los refugiados palestinos en el Campo de Refugiados de Brasil, en el sur de la ciudad de Gaza, llamado así porque su país financió la renovación del campo en la década de 1990.
El diplomático brasileño viajó desde Ramala a la Franja de Gaza, donde fue recibido calurosamente por los residentes del campamento. Afortunadamente para él, y para los seguidores brasileños entre los refugiados, Brasil ganó 1-0.
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