El presidente de Túnez, Kais Saied, ha sido acusado de allanar el camino a la normalización con el Estado ocupante de Israel tras promulgar un decreto por el que se aprueba el Protocolo de Madrid para la Gestión Integrada de las Zonas Turísticas del Mediterráneo. El protocolo ha sido firmado por veinte países, entre ellos Israel.
Según el ex diputado Salem Labeid, "sólo unos días después de la Declaración de Djerba en la Cumbre de la Francofonía, que calificó la ocupación, el asesinato y la violencia [de Israel] contra el pueblo palestino como los más atroces de la historia de la humanidad... el presidente firmó el decreto número 917 el 29 de noviembre -Día Internacional de la Solidaridad con el Pueblo Palestino- por el que se aprueba un protocolo para la Gestión Integrada de las Zonas Turísticas del Mediterráneo adoptado en Madrid en 2008 y publicado en el Boletín Oficial".
Añadió en Facebook que el "controvertido acuerdo" fue presentado en su carácter de normalización a la Asamblea de Representantes del Pueblo en junio de 2020, cuando 144 diputados votaron a favor de posponerlo bajo la presión de la campaña popular antinormalización, la Campaña Palestina para el Boicot Académico y Cultural a Israel (PACBI), y la Campaña Tunecina para el Boicot Académico y Cultural a Israel.
"Firmar y publicar este protocolo en ausencia de un consejo legislativo elegido de forma libre y transparente que exprese la voluntad popular, no es una prioridad legislativa ni una expresión de necesidad urgente", explicó Labeid. "Es un ejemplo de la negación de la cultura nacional que se opone a la normalización [con Israel] y aboga por la justa causa [palestina] por la que han muerto mártires y que los tunecinos defienden desde hace décadas con su sangre, su dinero y diversos medios políticos y simbólicos".
El último de ellos, señaló, fue el izado de la bandera de Palestina por un joven aficionado al fútbol durante el partido del Mundial entre Túnez y Francia la semana pasada. "Desgraciadamente, la única forma en que podemos interpretar y entender la aprobación de este acuerdo [por Saied] en este momento es como un paso hacia la normalización en un momento en que se está negando la insistencia en que 'la normalización es alta traición'."