Un preso político egipcio, Jihad Abdel-Ghani, ha muerto de cáncer de mandíbula y garganta en el centro médico de la prisión de Badr, informó ayer Ikhwan Online.
El detenido, de 32 años, tenía una hija de 14 años y un hijo de nueve, añadió el sitio web de noticias afiliado a los Hermanos Musulmanes.
Numerosos defensores de los derechos habían pedido recientemente la liberación de Abdel-Ghani, citando sus palabras de que quería "morir fuera de la cárcel, cerca de mis hijos".
Defensores y organizaciones de derechos humanos locales e internacionales han criticado reiteradamente las detenciones políticas arbitrarias en Egipto desde el golpe militar de 2013 que llevó a Abdel Fattah Al-Sisi a la presidencia.
LEER: 74 presos palestinos han muerto por negligencia médica