El ministro turco de Asuntos Exteriores ha revelado que China se ha negado a permitir que el embajador turco visite la región uigur de la provincia noroccidental de Xinjiang, admitiendo que ello ha tensado los lazos entre ambas naciones.
En una rueda de prensa de fin de año celebrada el jueves en la capital, Ankara, el ministro de Asuntos Exteriores, Mevlut Cavusoglu, declaró que el gobierno chino "dijo que una delegación humanitaria de Türkiye podría venir a examinar [Xinjiang]. Hace cinco años que [el presidente chino] Xi [Jinping] propuso esto. ¿Por qué llevan cinco años impidiendo la visita de esta delegación, por qué no cooperan?".
Como resultado, dijo, "los lazos turco-chinos se han resentido porque Pekín está molesto por nuestra actitud en la cuestión de los uigures túrquicos. Tienen solicitudes de extradición de personas que son nuestros ciudadanos, que viven en Türkiye todo el tiempo. Por lo tanto, no accedemos a ninguna de esas peticiones".
LEER: El sindicato de trabajadores quiere "salvar a Túnez del colapso"
Cavusoglu calificó de "mentira total" las afirmaciones e informaciones que durante años han afirmado que Ankara ha extraditado a uigures del país a China y subrayó: "Defendemos los derechos de los uigures túrquicos en el ámbito internacional y esto molesta a China. Pero se trata de una cuestión humanitaria".
Citó el informe de 48 páginas que el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas publicó en septiembre sobre los uigures, según el cual las detenciones masivas en la región de Xinjiang a lo largo de los años estuvieron marcadas por una evidente documentación de torturas, violencia sexual, trabajos forzados y abortos y esterilizaciones forzosos. Ese informe "revela todas las violaciones [de derechos humanos]. Tenemos que reaccionar ante ello".
En lugar de permitir que el embajador turco en China visite libremente la región donde viven los turcos uigures, declaró Cavusoglu, Pekín quiere que siga un "programa que ellos le proporcionan".
Lo que Turquía quiere es cooperar con China de forma transparente, insistió el ministro de Asuntos Exteriores. "¿Por qué deberíamos convertirnos en una herramienta para la propaganda de China? Queremos cooperar, no vemos esto como una cuestión política. No somos categóricamente antichinos. Siempre hemos dicho que apoyamos la política de una sola China".
A menos que se indique lo contrario en el artículo, este trabajo de Middle East Monitor/Monitor de Oriente está bajo licencia Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Si la(s) imagen(es) lleva(n) nuestro crédito, esta licencia también se aplica a ellos. ¿Qué significa esto? Para otros permisos por favor contáctenos. 
