Las Fuerzas de Ocupación israelíes han observado un aumento de los suicidios tras la muerte de 44 soldados el año pasado, la cifra más alta en cinco años, según las estadísticas publicadas por el Ejército israelí.
La mayoría de las muertes se debieron a suicidios, ya que al menos 14 soldados se quitaron la vida en 2022, frente a los 11 del año anterior.
Además, no se sabe con certeza si otros dos fueron accidentales o suicidios, según el general de brigada israelí Yoram Knafo, jefe de Estado Mayor de la Dirección de Recursos Humanos del Ejército.
Esto también supone un aumento con respecto a 2020, cuando se sospechaba que nueve soldados habían muerto por suicidio.
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La mayoría de los suicidas en las Fuerzas de Ocupación israelíes el año pasado eran soldados varones alistados en el ejército, dijo Knafo a los periodistas. Añadió que en dos de los 14 casos se trataba de soldados solitarios, que no contaban con el apoyo de sus familias.
Knafo afirma que los militares son conscientes de este problema creciente y que, por ello, están aplicando una nueva forma de evitar los escenarios de suicidio mediante el estudio de los "sectores de población en peligro".
Sin embargo, según The Jerusalem Post, cuando se pidió a Knafo en una rueda de prensa que explicara cómo clasifican a estas personas, no pudo confirmar los criterios y respondió que se trata de una "evaluación caso por caso".
Mientras tanto, los militares también constataron un drástico aumento del número de soldados gravemente heridos, con 158, frente a los 92 de 2021. Siete soldados murieron atropellados, diez murieron por enfermedad y otros seis murieron en accidentes de trabajo o entrenamiento en 22, según los datos.