El Centro Insan para la Democracia y los Derechos Humanos advirtió ayer de la extensión de los asentamientos israelíes en Cisjordania ocupada y pidió una postura internacional contra esta política, según un comunicado.
El grupo de derechos humanos expresó su preocupación por las actividades de asentamiento, citando información facilitada por el Instituto de Investigación Aplicada sobre proyectos de asentamiento, según la cual unas 12.943 unidades de asentamiento obtuvieron licencias en la Cisjordania ocupada y Jerusalén Oriental.
El Instituto de Investigación también informó de que la ocupación israelí demolió 901 viviendas palestinas en 2022.
Según la declaración, las autoridades de ocupación israelíes emitieron docenas de órdenes militares para ampliar los asentamientos, construir puentes y abrir nuevas calles para conectar los asentamientos ilegales entre sí.
Concluyendo su declaración, el grupo de derechos afirmó que las actividades de asentamiento israelíes en la Cisjordania ocupada equivalen a violaciones del artículo 49 de la Cuarta Convención de Ginebra.
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