La justicia iraní condenó ayer a muerte al ex viceministro de Defensa Alireza Akbari, acusado de espiar para Gran Bretaña.
Un comunicado del Ministerio de Inteligencia iraní describió a Akbari, que fue viceministro de Defensa hasta 2001, como "uno de los más importantes infiltrados del servicio de espionaje británico en los aparatos sensibles y estratégicos del país", según la agencia de noticias oficial iraní IRNA.
La inteligencia iraní reveló su espionaje proporcionándole información falsa, según el ministerio.
La agencia de noticias semioficial Tasnim informó de que Akbar espió los detalles de anteriores conversaciones nucleares entre Irán y las potencias occidentales, según la agencia Anadolu.
Akbari fue viceministro de Defensa con el presidente Mohammad Jatamí e impulsó mejores relaciones con Occidente.
No ha aparecido en público desde 2019, y las autoridades no han publicado ningún detalle sobre su juicio.
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