Los migrantes realizaron casi 330.000 intentos de entrar en la Unión Europea (UE) sin autorización el año pasado, la cifra más alta desde 2016, según ha revelado este viernes la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex).
La agencia comunitaria Frontex confirmó que casi la mitad de los intentos realizados en 2022 se hicieron por tierra a través de los Balcanes Occidentales, según sus "cálculos preliminares". Independientemente de la vía de entrada, sirios, afganos y tunecinos representaron juntos casi el 47% de los intentos de cruce de fronteras.
La agencia añadió que los hombres representaron más del 80% de los intentos de entrada.
La agencia cuenta los intentos de entrada en lugar del número de personas que intentan entrar en Europa porque a menudo es difícil identificar a los migrantes, que suelen viajar sin pasaporte, y algunos pueden intentar entrar varias veces.
Las personas que llegan a las fronteras europeas para solicitar asilo tienen posibilidades razonables de que se les permita la entrada, mientras que a los que vienen sin visado en busca de empleo y una vida mejor se les suele denegar.
LEER: Descubierto el próximo plan de limpieza étnica de Israel
Más de un millón de personas, en su mayoría sirios que huyen del conflicto en su país, entraron en la UE en 2015, desbordando las instalaciones de acogida y desencadenando una de las mayores crisis políticas del bloque de 27 países.
Los Estados miembros siguen discutiendo sobre quién debe responsabilizarse de las personas que llegan sin permiso y si sus vecinos y socios deben estar obligados a ayudar. Los intentos de reformar el sistema de asilo del bloque apenas han progresado.
Las últimas cifras de Frontex no incluían los casi 13 millones de refugiados ucranianos contabilizados en las fronteras exteriores de la UE entre febrero y diciembre del año pasado.
Se han introducido medidas especiales de emergencia para facilitar su entrada y ayudarles a encontrar alojamiento, formación y empleo a corto plazo.
En el último año ha seguido aumentando el número de personas que realizan peligrosas travesías por el Mediterráneo en lanchas neumáticas y botes inflables mal equipados y a menudo sobrecargados.
Según Frontex, se registraron más de 100.000 intentos de travesía, lo que supone un aumento de cerca del 50% con respecto a 2021.
Los migrantes procedentes de Egipto, Túnez y Bangladesh fueron los que más intentos realizaron. La agencia dijo que 2022 experimentó la llegada del mayor número de personas en cinco años desde Libia, el principal punto de partida en el norte de África. El número de personas que abandonan Túnez ha alcanzado el nivel más alto de la historia reciente.