La escasez de combustible y su encarecimiento sin precedentes han pasado factura a las panaderías que operan en las zonas controladas por el régimen sirio, obligándolas a elaborar pan sólo dos o tres veces por semana. Esto ha provocado un aumento significativo del precio del pan, según informa Anadolu.
Con un salario medio de unos 20 dólares al mes, el coste del pan ha subido hasta el equivalente a 50 céntimos al día por un paquete de pan suficiente para dos personas. El precio en el mercado negro es aún mayor.
Las panaderías de Damasco abren una vez a la semana, y se forman largas colas de clientes para ser atendidos a medida que empeora el sufrimiento de los sirios en las zonas controladas por el régimen. La crisis es tan grave que figuras habitualmente leales y conocidas han criticado al régimen.
LEER: Assad pide que las conversaciones con Turquía se basen en el fin de su "ocupación"
La crisis se ve agravada por la escasez de trigo de producción local. Los medios de comunicación pro-régimen citaron al ministro de Agricultura diciendo que la producción de trigo de Siria este año ascendía a 1,7 millones de toneladas, mientras que el país necesita 3,2 millones.
En los últimos meses, las zonas controladas por el régimen han sido testigo de sucesivas crisis económicas, que han provocado una caída récord del precio de la lira siria frente al dólar estadounidense. A principios de este año, el Banco Central de Siria redujo el tipo de cambio oficial de 3.015 a 4.522 liras sirias por dólar, mientras que el tipo del mercado negro utilizado en la mayoría de las actividades económicas ronda las 6.500.
A falta de una solución política en el horizonte, los observadores esperan que las crisis económicas continúen en un futuro próximo. Las principales víctimas son los ciudadanos, cuyo poder adquisitivo ha caído a un nivel sin precedentes.