Parece que al gobierno israelí se le acaba el tiempo, contrariamente a lo que se creía. El gobierno corre contrarreloj e intenta aprobar leyes y disposiciones legislativas para cambiar el sistema judicial, entre otras cosas.
La decisión del Tribunal Supremo israelí de apartar a Aryeh Deri de su cargo de ministro, tras haber sido previamente condenado y encarcelado por cargos de corrupción, entre ellos malversación de fondos gubernamentales para su partido y evasión de impuestos, conlleva varias predicciones, entre las que destacan las señales de escalada emitidas por el Consejo de Sabios de la Torá a través de una declaración, en la que afirmaban: "Todos estamos contigo, Aryeh, no te preocupes. Tienes a todo el público detrás de ti, a toda la nación israelí", según el Canal 12 de Israel.
Los intentos del gobierno de cambiar el sistema judicial, manipular sus poderes y trabajar para aprobar una "cláusula de anulación" pueden crear verdaderos desafíos para la actual coalición de gobierno, dado que lo que está ocurriendo es considerado por algunos como un "golpe político". El ex Presidente retirado del Tribunal Supremo, Aharon Barak, se refirió a ello diciendo que estas reformas conducirían al debilitamiento del Tribunal Supremo y serían el "principio del fin de la Tercera Casa", expresión bíblica que describe la caída de Israel.
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Ante el gobierno de Netanyahu se abren posibles escenarios, como que Shas acepte la decisión del Tribunal, permanezca en la actual coalición de gobierno, nombre a otro ministro del partido en lugar de Deri o rechace la decisión. Esto significa que la "coalición actual" estará en peligro, porque el rechazo pondrá en aprietos al gobierno si no se somete al Poder Judicial y acepta lo dictado por éste, evitando al mismo tiempo la ira del partido Shas, ya que pesa mucho en la estructura de la coalición.
Si se rechaza la decisión del Poder Judicial, las calles de Israel pueden encenderse y puede producirse una mayor tensión y enfrentamiento entre el gobierno y la oposición, con el fortalecimiento de la posición de la oposición, que dice que el gobierno está siendo dirigido por un "gobierno matón" que no respeta las leyes del Estado de Israel que se dictan a través de su institución oficial. Por otra parte, la adhesión de cualquier otro partido de la oposición para llenar el vacío si Shas abandonara la actual coalición de gobierno es poco probable.
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Netanyahu domina el juego de jugar sobre cuerdas contradictorias entre los políticos israelíes, y sus experiencias pasadas con Naftali Bennett y Avigdor Lieberman son la mejor prueba de su superación de tales crisis, ya que se unieron a él en alianzas anteriores y, cuando entró en crisis, les culpó de lo sucedido. El impotente Lieberman, dijo en su momento: "Netanyahu es el mayor defraudador, y os engañará como nos engañó a nosotros antes que a vosotros", dirigiéndose a los socios del actual gobierno.
En conclusión, el defraudador Netanyahu no fracasará, y trabajará para conseguir lo que Charles Darwin creía, "no es la más intelectual de las especies la que sobrevive; no es la más fuerte la que sobrevive; sino que la especie que sobrevive es la que es capaz de adaptarse y ajustarse mejor al entorno cambiante en el que se encuentra."
Traducido de Arabi21, 23 de enero de 2023
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