El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha acusado a los líderes de la oposición de apoyar una "incitación irresponsable" que incluye amenazas de muerte contra él y los cargos electos de su gabinete.
En la apertura de su reunión de gabinete de ayer, Netanyahu dijo que espera que los líderes de la oposición calmen a la gente y pongan fin a la incitación desenfrenada contra él, sus ministros y los miembros de la Knesset.
"Hemos visto una clara amenaza de matar a un primer ministro en Israel por parte de una persona destacada en las manifestaciones contra el gobierno, y esto es el resultado de una incitación irresponsable apoyada por los líderes de la oposición", dijo Netanyahu, pidiendo a los líderes de la oposición que denuncien la incitación y a los instigadores.
"Se trata de un peligro real para la democracia y todo el mundo debería oponerse a ello", añadió.
Netanyahu se refería a un post en Facebook del ex piloto de combate, Zeev Raz, quien dijo el sábado que "si un primer ministro llega y asume poderes dictatoriales, ese primer ministro está marcado por la muerte ... junto con sus ministros y la gente que hace su voluntad".
A primera hora del domingo, la Fiscalía israelí anunció que no dudaría en avalar investigaciones y presentar acusaciones contra quienes se expresen más allá de los "niveles de libertad de expresión".
La policía citó a Raz para investigarlo, y anunció que se investigará a cualquier sospechoso de difundir incitaciones contra una figura pública.
El jefe del Partido de Unidad Nacional, Benny Gantz, declaró ayer al sitio web de noticias Ynet que el plan para debilitar el poder judicial, dirigido por Netanyahu y el ministro de Justicia, Yariv Levin, es "el principio de un gobierno autoritario, y el principio del fin de la democracia israelí tal como la conocemos."
"Si controlan el poder judicial, si esto no es el comienzo de la tiranía, ¿qué es? Esto no es democracia. La batalla se decide en las elecciones, pero esto es el principio del mal. Debemos mantener equilibrios, y Netanyahu, como jefe de gobierno, debe ser responsable de los equilibrios", añadió Gantz.
"Me aterra la posibilidad de una crisis constitucional si el poder judicial y el Tribunal Supremo dicen que el gobierno emitió órdenes ilegales. Entonces el jefe del Estado Mayor del Ejército se enfrentará a un dilema muy grande", dijo.
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