Egipto ha restaurado, documentado y abierto a los turistas la tumba del Reino Medio de Meru, el yacimiento más antiguo accesible al público en la orilla oeste de Luxor, donde se encuentran algunos de sus monumentos faraónicos más espectaculares, como el Valle de los Reyes, informa Reuters.
Meru era un alto funcionario de la corte del rey de la XI Dinastía, Mentuhotep II, que reinó hasta 2004 a.C. y que, al igual que Meru, fue enterrado en la necrópolis de Asasif del Norte, según informó el jueves el Ministerio en un comunicado.
La tumba excavada en la roca de Meru fue restaurada por el Centro Polaco de Arqueología Mediterránea de la Universidad de Varsovia y el Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto.
"Se trata del primer yacimiento de una época tan temprana en Tebas occidental que se hace accesible a los visitantes", declaró Fathi Yassin, director general de Antigüedades del Alto Egipto, según el comunicado del Ministerio.
La tumba, que daba a la avenida de procesión al templo de Mentuhotep II, contiene un pasillo que conduce a una capilla de ofrendas con un nicho para una estatua del difunto. Un pozo funerario desciende hasta una cámara sepulcral con un sarcófago.
"Ésta es la única sala decorada de la tumba, con una decoración inusual de pintura sobre yeso de cal", explicó Yassin.
La tumba de Meru se conocía al menos desde mediados del siglo XIX, según la misión arqueológica egipcia polaca. Conservadores italianos limpiaron algunas de las pinturas murales en 1996.
Algunos de los funcionarios más destacados del Reino Medio fueron enterrados en Asasif del Norte, según el comunicado.
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