El ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben-Gvir, amenazó ayer con derramar la sangre de quienes hagan daño a los colonos israelíes.
Los medios de comunicación israelíes citaron al ministro diciendo que todo aquel que "levante la mano para hacer daño a los colonos" debe saber que ha dado instrucciones a la policía para que "derrame sangre".
Las declaraciones de Ben-Gvir se produjeron después de que las fuerzas de ocupación asesinaran ayer a seis ciudadanos palestinos en la ciudad cisjordana de Yenín.
El Ministerio de Sanidad palestino declaró que seis palestinos murieron y otros nueve resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, después de que las fuerzas israelíes asaltaran el campo de refugiados de Yenín.
Los palestinos muertos tenían entre 22 y 49 años. Entre ellos se encontraban Muhammad Wael Ghazzawi, Tariq Ziyad Natour, Ziyad Amin Al-Zar'ini, Abdel Fattah Hussein Kharousha, Moatasem Nasser Sabbagh y un mártir desconocido.
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