Más de 200.000 personas han firmado una petición en la que se pide que se ponga fin a la demolición de viviendas palestinas como primer paso hacia el desmantelamiento del apartheid, declaró ayer Amnistía Internacional.
La petición del grupo de derechos humanos, titulada Demoler el apartheid, no las casas palestinas, está dirigida al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y ha sido firmada por personas de al menos 174 países.
La petición se presentó a las autoridades de ocupación israelíes el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial. Este día conmemora el asesinato de 69 manifestantes pacíficos contra el apartheid a manos de la policía sudafricana el 21 de marzo de 1960.
"Las políticas de planificación discriminatorias de Israel y la destrucción sistemática de viviendas palestinas ejemplifican el racismo que subyace en su cruel sistema de apartheid", ha declarado Heba Morayef, directora regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.
"Durante décadas, las autoridades israelíes han perseguido sus objetivos demográficos explícitamente racistas obligando a los palestinos a abandonar sus hogares y sus tierras. Desde el comienzo de 2023, más de 400 palestinos han sido desplazados como consecuencia de las demoliciones y cientos de miles más corren peligro", ha afirmado Morayef.
El apartheid es un crimen contra la humanidad y una grave violación de los derechos humanos. El hecho de que las autoridades israelíes sigan sin rendir cuentas es una mancha en la conciencia de la comunidad internacional.
"Hoy, la exigencia de Amnistía Internacional de que se ponga fin a esta injusticia cuenta con el respaldo de 203.410 personas de países de todo el mundo. Esta solidaridad es un recordatorio de que el coro de voces que se alzan contra el apartheid de Israel es cada vez más fuerte."
Morayef subrayó que Amnistía Internacional "no guardará silencio hasta que se haya desmantelado el apartheid y las autoridades israelíes rindan cuentas".
Amnistía Internacional reiteró su llamamiento a todos los Estados para que presionen a Israel para que ponga fin a las demoliciones de viviendas, los traslados forzosos y la expansión de los asentamientos; levante el bloqueo de la Franja de Gaza; y ponga fin a la impunidad de los ataques ilegítimos contra palestinos por parte del ejército y los colonos ilegales.