El presidente del partido Hogar Judío, Avigdor Lieberman, pidió ayer al líder de la oposición, Yair Lapid, que detenga inmediatamente las conversaciones sobre la crisis de la reforma judicial.
En Twitter, Lieberman escribió: "Basta ya de hacer el bufón. Pido a los equipos de Yesh Atid y del campo estatal que dejen de participar en el juego de culpas de [el primer ministro] Bibi. Es hora de que digan con voz clara: no vamos a cooperar con el fraude de Netanyahu".
Se refirió a las conversaciones como un intento de Netanyahu de detener la protesta estatal, que se hizo más feroz tras el despido del ministro de Defensa, Yoav Gallant.
Esto se produjo tras los comentarios del líder de Shas, Aryeh Deri, quien afirmó que el proyecto de ley de reforma judicial está listo para la segunda y tercera lecturas.
Horas después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, declarara la suspensión del proceso de revisión judicial, Deri habló al periódico de su partido, Haderech, elogiando la medida y reconociendo que la coalición se habría roto si no se aplazaba el plan.
Deri instó a los líderes de la oposición a aprovechar el aplazamiento y advirtió de que, en caso de que fracasaran, el Gobierno aún podría sacar adelante las propuestas originales.
"No olvidemos que las leyes están listas para una segunda y tercera lectura. No necesitamos esperar dos meses más", dijo. "Cuando queramos podemos convocar el pleno y aprobar las leyes".
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