Las fuerzas de paz de la ONU en Líbano advirtieron de una "grave escalada" cuando Israel lanzó ataques aéreos en Líbano y la Franja de Gaza a primera hora del viernes, informa la Agencia Anadolu.
"Las acciones de este último día son peligrosas y pueden provocar una grave escalada", declaró la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL) en un comunicado. "Instamos a todas las partes a que cesen ya todas las acciones a través de la Línea Azul".
El jefe de la misión de la FINUL y comandante de la fuerza, el general de división Aroldo Lázaro, está hablando con las autoridades de ambos lados de la Línea Azul, según el comunicado.
"Ambas partes han dicho que no quieren una guerra", añadió.
El ejército israelí lanzó ataques aéreos en Líbano horas después de atacar la Franja de Gaza a primera hora del viernes.
En un comunicado, afirmó que había atacado objetivos del grupo de resistencia palestino Hamás en el sur del Líbano.
El ejército israelí dijo que no permitiría a Hamás "operar desde el interior del Líbano" y "responsabiliza al Estado libanés de todo fuego dirigido que emane de su territorio".
Golpeó dos túneles en Beit Hanoun y Khan Yunis y dos fábricas de armas en Gaza en respuesta a "las violaciones de la seguridad de Hamás."
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En reacción a los ataques aéreos israelíes en Gaza, Hazem Kassem, portavoz de Hamás, dijo que Israel "tiene toda la responsabilidad" por la escalada y la agresión contra Jerusalén y Gaza.
El grupo lanzó cohetes desde la Franja de Gaza contra Israel tras los últimos ataques.
El ejército israelí también emitió una advertencia en Twitter diciendo que estaban sonando sirenas en el sur de Israel.
También se activaron las sirenas en la ciudad de Ashkelon tras el lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza.
Los acontecimientos se produjeron después de que las fuerzas israelíes asaltaran la sala de oración de Al Qibli, en el complejo de la mezquita de Al Aqsa, en la Jerusalén Oriental ocupada, y desalojaran por la fuerza a fieles palestinos durante dos noches seguidas.