El jefe de la ONU condenó el sábado el "estallido de combates" entre el ejército sudanés y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido, informa Anadolu.
"El secretario general pide a los líderes de las Fuerzas de Apoyo Rápido y de las Fuerzas Armadas de Sudán que cesen inmediatamente las hostilidades, restablezcan la calma e inicien un diálogo para resolver la crisis actual", declaró Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, Antony Guterres.
"Cualquier nueva escalada de los combates tendrá un impacto devastador sobre la población civil y agravará aún más la ya precaria situación humanitaria en el país", añadió.
Guterres también pidió a los Estados miembros de la ONU en la región "que apoyen los esfuerzos para restaurar el orden y volver a la senda de la transición", según el comunicado.
"El Secretario General está dialogando con los líderes de la región y reafirma el compromiso de las Naciones Unidas de apoyar al pueblo de Sudán en sus esfuerzos por restaurar una transición democrática y hacer realidad sus aspiraciones de construir un futuro pacífico y seguro", añadió.
En Twitter, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, declaró estar: "profundamente alarmado por los enfrentamientos armados en Sudán. Plena solidaridad con el pueblo de Sudán, que merece algo mejor. Se necesita urgentemente la voz de la razón para detener la violencia y retomar el prometedor camino anterior hacia la paz y la transición civil".
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A primera hora del sábado estallaron combates entre el ejército sudanés y combatientes de la RSF en Jartum, y se escucharon disparos y bombas cerca del cuartel general del ejército y del palacio presidencial, según un reportero de Anadolu en Jartum.
Mientras que la RSF acusó al ejército de atacar a sus fuerzas al sur de Jartum con armas ligeras y pesadas, el ejército dijo que la fuerza paramilitar estaba "difundiendo mentiras" y la declaró grupo "rebelde".
La disputa entre las dos partes salió a la superficie el jueves, cuando el ejército dijo que los recientes movimientos de la RSF se habían producido sin coordinación y eran ilegales, centrándose sus desavenencias en la propuesta de transición a un gobierno civil.
Sudán carece de gobierno desde octubre de 2021, cuando el ejército destituyó al gobierno de transición del primer ministro Abdalla Hamdok y declaró el estado de excepción.
El pasado diciembre, las fuerzas militares y políticas de Sudán firmaron un acuerdo marco para resolver la crisis, que duraba ya meses.
La firma del acuerdo definitivo estaba prevista para el 6 de abril, pero se retrasó. Hasta ahora no se ha anunciado ninguna nueva fecha.
Estaba previsto que el periodo de transición de Sudán, que comenzó en agosto de 2019, finalizara con la celebración de elecciones a principios de 2024.
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