Una delegación de altos cargos del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (Hamás) visitará hoy Arabia Saudí tras años de deterioro de las relaciones, según informan los medios de comunicación árabes.
Según un informe del diario Al-Resalah, la delegación, que incluirá al jefe del buró político Ismail Haniyeh, a su adjunto Saleh Al-Arouri y al jefe de la oficina de Hamás en la diáspora, Jaled Mashaal, estará en el reino para realizar la Umrah, la peregrinación menor. Sin embargo, "no ha descartado" celebrar reuniones con funcionarios saudíes.
Al-Araby Al-Jadeed, citando fuentes informadas, también informó de que la delegación de Hamás llegará hoy a Arabia Saudí y que Haniyeh también estará acompañado por el jefe adjunto del buró político en el extranjero, Mousa Abu Marzouk, y Zaher Jabarin, responsable de asuntos de prisioneros.
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Se ha especulado que cualquier reunión con funcionarios saudíes, conducirá a la posible restauración de las relaciones entre Riad y Hamás, que se deterioraron en 2007 después de que el gobierno saudí culpara al movimiento por el fracaso del Acuerdo de La Meca, que fue firmado por Hamás y Al Fatah para poner fin a los enfrentamientos entre los dos partidos en la Franja de Gaza después de la victoria del primero en las elecciones de 2006.
Las relaciones se estancaron aún más en 2019, después de que el reino detuviera a decenas de activistas y miembros, entre ellos el ex representante Mohamed Al-Khodari, que fue liberado en octubre del año pasado. Después de que dos ciudadanos palestinos fueran liberados de una prisión saudí en febrero, Hamás declaró: "Afirmamos nuestro interés en mantener relaciones positivas con nuestros hermanos de Arabia Saudí y todos los países hermanos al servicio de la causa palestina y de nuestra nación árabe e islámica."
La llegada de altos cargos de Hamás al reino se produce después de que Arabia Saudí acordara restablecer relaciones diplomáticas con su rival regional, Irán, y de una reunión oficial con el gobierno liderado por los Houthi en la capital yemení, Saná. También se produce tras conocerse que el supuesto interés de Arabia Saudí por normalizar las relaciones con Israel se ha enfriado en los últimos meses, en medio de las continuas escaladas y provocaciones del ejército israelí y los colonos ilegales en la Cisjordania ocupada y la mezquita de Al Aqsa en Jerusalén.