Tras el éxito de China en el restablecimiento de las relaciones entre Arabia Saudí e Irán, los círculos políticos y diplomáticos de Israel anticipan un intento chino de resolver el conflicto palestino-israelí, citando el acercamiento entre Teherán y Riad mediado por Pekín. Sin embargo, Israel mantiene su compromiso con Estados Unidos y reclama su mayor implicación en Oriente Próximo.
"Tras la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Riad y Teherán, con la mediación de Pekín, años después de su separación, los círculos políticos israelíes predicen que los chinos también están intentando resolver otro conflicto en Oriente Próximo, que dura ya décadas, el conflicto entre palestinos e israelíes", escribió el corresponsal político Itamar Eichner en Yedioth Ahronoth. "De ahí que el ministro de Asuntos Exteriores, Eli Cohen, mantuviera una llamada con su homólogo chino, Chen Gang, sin que Israel anunciara que la conversación incluyera ningún debate sobre las negociaciones con los palestinos, sino que confirmara que hablaron de la amenaza del programa nuclear iraní".
Añadió en un informe traducido por Arabi 21 que "el anuncio chino afirmaba que el ministro de Asuntos Exteriores habló con sus homólogos israelí y palestino, Cohen y Riyad Al-Maliki, y se centró con ellos en un tema completamente distinto, que es el temor a una escalada de las tensiones entre ambas partes, y su apoyo a la reanudación de las negociaciones entre ellas. Aseguró a Cohen que el acuerdo entre Arabia Saudí e Irán es un buen ejemplo de superación de diferencias mediante el diálogo, y le pidió que mostrara valentía política y avanzara hacia la reanudación del diálogo con los palestinos."
Estos acontecimientos, señaló Eichner, revelaron a Israel la creciente "injerencia" china en Oriente Medio.
"El primer ministro Benjamin Netanyahu fue preguntado al respecto en una entrevista con la CNBC, y dijo: 'Respetamos a China, tratamos mucho con China, pero también sabemos que tenemos una alianza indispensable con nuestro gran amigo Estados Unidos'". El comentarista de asuntos militares y de seguridad Ron Ben-Yishai señaló que Washington considera a Pekín un competidor y un enemigo importante en todos los ámbitos económicos y militares, por lo que a Israel le preocupa que China refuerce su dominio en Oriente Próximo a expensas de Estados Unidos, dado que este país es el patrocinador de Israel en la región".
VIDEO: Las fuerzas israelíes dañan la sala de oración de Al Aqsa y se llevan objetos religiosos
A menos que se indique lo contrario en el artículo, este trabajo de Middle East Monitor/Monitor de Oriente está bajo licencia Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Si la(s) imagen(es) lleva(n) nuestro crédito, esta licencia también se aplica a ellos. ¿Qué significa esto? Para otros permisos por favor contáctenos. 
