La empresa de seguridad privada G4S va a desinvertir completamente en Israel, según informó ayer el movimiento Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) en un anuncio calificado de "gran victoria del activismo de derechos humanos contra la complicidad empresarial". Al parecer, la empresa matriz de G4S, Allied Universal, ha vendido todos sus negocios restantes en el Israel del apartheid tras años de campañas emprendidas por el movimiento BDS en favor de los derechos de los palestinos.
G4S sufrió graves "daños a su reputación" y perdió lucrativos contratos de inversión a causa del activismo pro Palestina. Otras campañas de derechos humanos también se han dirigido contra G4S por lo que, según los activistas, es un "largo y violento historial de abusos contra los derechos humanos de presos, migrantes y otras comunidades en todo el mundo, incluidos Reino Unido, Sudáfrica y Estados Unidos".
La campaña de BDS contra G4S fue lanzada por organizaciones de derechos humanos y de derechos de los presos palestinos en 2012 para apoyar la gran huelga de hambre llevada a cabo entonces por presos políticos palestinos. Esta presión llevó a la desinversión de alto perfil de G4S. Según BDS, entre ellas se encuentran la Iglesia de Suecia, la Iglesia Metodista Unida, la Fundación Bill y Melinda Gates, un fondo de inversión kuwaití, agencias de la ONU, sindicatos, universidades y cadenas de restaurantes, entre otros, obligando a la empresa en 2016 a desinvertir en el sistema penitenciario de Israel, los puestos de control militar y los asentamientos ilegales.
Explicando la razón por la que G4S desinvirtió de Israel, BDS dijo que la gota que colmó el vaso y obligó a la empresa matriz Allied Universal a poner fin a su complicidad en los abusos de los derechos humanos del apartheid israelí es la firme posición adoptada por la Caisse de dépôt et placement du Québec (CDPQ), que gestiona los fondos del Plan de Pensiones de Quebec y otros planes de pensiones públicos. La CDPQ se convirtió en el mayor accionista de Allied Universal en 2019. La firma canadiense apoyó a la empresa en su oferta para la adquisición de G4S. Se dice que esto fue una violación directa del compromiso de CDPQ con la inversión ética y socialmente responsable.
A principios de este mes, un legislador de Quebec habría criticado en una comisión parlamentaria la inversión de CDPQ en Allied Universal, afirmando que "los casos de tortura [israelí] contra presos políticos palestinos, incluidos niños, están ampliamente documentados por organizaciones de derechos humanos". El director general de CDPQ respondió: "Estoy completamente de acuerdo con usted. Este no es el tipo de actividad que respaldamos en absoluto".
Allied Universal no respondió a la solicitud de comentarios de MEMO.