La Liga Profesional saudí quiere fichar a diez futbolistas destacados, informó ayer AFP.
Las delegaciones saudíes del Al-Hilal y el Al-Ittihad, campeones de liga, están en París y Madrid para conseguir los fichajes del astro argentino Lionel Messi y del delantero francés Karim Benzema, según fuentes e informes.
El gobierno saudí ha traspasado la propiedad de cuatro de los principales equipos de fútbol del país a su fondo soberano, con lo que aumenta su poder financiero en este deporte.
El Fondo de Inversión Pública informó ayer de que Al Ittihad, Al Ahli, Al Hilal y Al Nassr -donde juega la estrella portuguesa Cristiano Ronaldo- han sido convertidos en entidades corporativas, tras haber sido gestionados anteriormente por el Estado. El fondo de 600.000 millones de dólares será propietario del 75% de cada uno de los cuatro clubes, mientras que el resto de las acciones estarán en manos de nuevas fundaciones sin ánimo de lucro.
Messi y Benzema, el defensa español Sergio Ramos, el extremo argentino Ángel Di María, el centrocampista croata Luka Modric, el portero francés Hugo Lloris, el centrocampista francés N'Golo Kanté, el delantero brasileño Roberto Firmino y los defensas españoles Jordi Alba y Sergio Busquets, El mediapunta croata Luka Modric y el guardameta francés Hugo Lloris encabezan la lista de jugadores con los que están negociando los saudíes en su intento de establecer una "liga competitiva" que capte la atención mundial.
Arabia Saudí, el mayor productor de petróleo del mundo, ha invertido cientos de millones de dólares en proyectos deportivos, como la adquisición de la estrella portuguesa Ronaldo por el club Al Nassr, la celebración de la carrera de Fórmula 1 en Yeda, partidos de fútbol con los principales clubes europeos y campeonatos mundiales de golf y boxeo.
Los críticos han afirmado que el reino intenta aumentar su reputación mediante una práctica conocida como "lavado deportivo".
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