Una fuente oficial italiana ha afirmado que las autoridades han deportado a más de 2.300 migrantes tunecinos que entraron ilegalmente en el país, lo que sitúa a los tunecinos a la cabeza de los migrantes procedentes del país en 2022.
La agencia de noticias italiana Nova cita al Defensor del Pueblo italiano para los Derechos de las Personas Detenidas, Mauro Palma, afirmando que las autoridades han deportado a 3.154 extranjeros de los 6.383 que se encuentran en centros de deportación en 2022. Aclaró que la mayoría de los deportados eran tunecinos, con 2.308 personas, frente a 58 que fueron deportados a Albania, 359 a Egipto y 189 a Marruecos.
Italia está intentando llegar a un acuerdo con Túnez para agilizar las expulsiones y redoblar los esfuerzos para impedir la salida de inmigrantes a través de sus costas. Las organizaciones de derechos humanos de Túnez critican la deportación forzosa de tunecinos. Por su parte, el Presidente Kais Saied ha declarado que se niega a que Túnez desempeñe el papel de policía fronteriza en el sur del Mediterráneo. El Ministerio del Interior italiano calcula que este año han llegado por mar a sus costas más de 53.000 inmigrantes, la mayoría procedentes de Túnez.
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