Un oficial de la embajada de Londres, que fue grabado infraganti por Al Jazeera hablando de “derrotar” a los ministros del gobierno británico, ha sido despedido de su puesto por el ministro de asuntos exteriores israelí, según confirma Al Jazeera.
Shai Masot, quien trabajaba en la embajada israelí de Londres como “alto funcionario político”, también se jactó de crear organizaciones de jóvenes en Reino Unido para promover los intereses de Israel, y habló sobre una “lista” de diputados, entre ellos, el conservador Crispin Blunt, presidente de la comisión parlamentaria de asuntos exteriores.
La embajada ha tratado de distanciarse de las actividades de Masot. El embajador Mark Regev le ha descrito como un miembro menor del personal, cuyos comentarios fueron inaceptables.
Sin embargo, el reportaje de investigación en el que Al Jazeera sacó a la luz esta historia, llamada “El Lobby”, también mostro la tarjeta de presentación de Masot, la cual le describía como “alto funcionario político”.
Masot también fue grabado hablando de oficiales británicos usando un lenguaje poco diplomático, llamando a Boris Johnson, secretario de exteriores británico, un “idiota”.
También dijo que el viceministro de Exteriores, Sir Alan Duncan, estaba causando “un montón de problemas”, lo cual parece ser su motivo para querer “derrotar” al oficial británico.
El reportaje de Al Jazeera también conecta la misión diplomática de Israel en Reino Unido con varias otras actividades pensadas para influenciar a políticos tanto ahora como en el futuro. Esto incluye el apoyo de varios grupos y sociedades universitarias consideradas pro-israelíes.
También se informó de que activistas vinculados a la embajada de Israel estaban planeando una conspiración para expulsar a la presidenta de la Unión Nacional de Estudiantes, Malia Bouattia.
Después de que el escándalo saliese a la luz, Masot fue retirado inmediatamente por el gobierno israelí y regresó a su país, donde se conoce que ha sido despedido formalmente.
El gobierno británico, tras aceptar las disculpas de Israel, considera ya “cerrado” este escándalo diplomático. Aun así, el Partido Nacional Escocés (SNP) pidió la semana pasada que se destituyese a Masot.
“Es totalmente inaceptable que el gobierno británico declare cerrado este asunto”, declaró Alex Salmond, ex líder del SNP y actual portavoz de asuntos exteriores. “Shai Masot debe marcharse, y debe marcharse inmediatamente, antes de que finalice su mandato en la Embajada de Israel.”
La petición del SNP ha inspirado a otros para exigir al gobierno que reduzca la influencia israelí en la política británica.
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