El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó el miércoles una orden ejecutiva para prohibir los fondos federales para colegios y universidades que permiten el antisemitismo, pero la medida generó algunas críticas por limitar potencialmente la libertad de expresión.
La orden extendería las protecciones contra la discriminación bajo la Ley de Derechos Civiles de 1964 a personas sujetas al antisemitismo en los campus universitarios.
“Éste es nuestro mensaje para las universidades: si quieren aceptar la enorme cantidad de dólares federales que reciben cada año, deben rechazar el antisemitismo. Es muy simple", dijo Trump durante una recepción de Hanukkah en la Casa Blanca.
El Título 6 de la Ley de Derechos Civiles prohíbe la discriminación por motivos de raza, color y nacionalidad en los programas y actividades que reciben asistencia financiera federal.
"Esta acción deja claro que el Título 6 de la Ley de Derechos Civiles, que prohíbe el financiamiento federal de universidades y otras instituciones que se dedican a la discriminación, se aplica a las instituciones que trafican con odio antisemita", dijo Trump. J Street, un grupo liberal de presión judío-estadounidense, criticó la orden.
Leer: ‘King’ Trump lashes US Jews for not loving Israel enough
"Esta orden ejecutiva, al igual que la legislación parlamentaria estancada en la que se basa, parece diseñada menos para combatir el antisemitismo y más para tener un efecto escalofriante en la libertad de expresión y tomar medidas enérgicas contra los críticos del campus de Israel", dijo en un comunicado.
La Liga Anti-Difamación, que rastrea actos de racismo, acogió con gusto la orden.
"En un clima de creciente antisemitismo, esta orden ejecutiva brinda una guía valiosa sobre el antisemitismo, brindando a las autoridades policiales y a los funcionarios del campus una importante herramienta adicional para ayudar a identificar y combatir este odio tan dañino", dijo el presidente ejecutivo Jonathan Greenblatt.
"También reafirma la protección de los judíos bajo el Título VI sin infringir los derechos de la Primera Enmienda", dijo en un comunicado.
El movimiento pro-palestino de Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) sobre las políticas de Israel hacia los palestinos en Cisjordania y la Franja de Gaza ha ganado apoyo entre algunos estudiantes universitarios en los últimos años.
Sin embargo, el movimiento recibió una reprimenda bipartidista en el Congreso de los Estados Unidos y muchos estados aprobaron medidas contra el BDS.
Algunos críticos sostienen que participar en boicots está protegido por el derecho constitucional de los estadounidenses a la libertad de expresión y que las críticas legítimas a las políticas israelíes podrían ser reprimidas con la excusa de combatir el antisemitismo.
A menos que se indique lo contrario en el artículo, este trabajo de Middle East Monitor/Monitor de Oriente está bajo licencia Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Si la(s) imagen(es) lleva(n) nuestro crédito, esta licencia también se aplica a ellos. ¿Qué significa esto? Para otros permisos por favor contáctenos.
