El secretario de Estado de EE.UU. Mike Pompeo dijo el viernes que Irán estaba "desesperadamente" mostrando su voluntad de volver a la mesa de negociaciones para obtener un alivio de las sanciones, pero advirtió contra la facilidad de Teherán en tales conversaciones, informa Reuters.
Las tensiones entre Washington y Teherán han aumentado desde 2018, cuando el presidente Donald Trump abandonó un acuerdo nuclear en 2015, y restauró duras sanciones económicas para presionar a Teherán a negociar restricciones más estrictas en su programa nuclear, el desarrollo de misiles balísticos y el apoyo a las fuerzas regionales de representación.
Las sanciones de los Estados Unidos han paralizado la economía iraní, pero hasta ahora no han llevado a la apertura de una negociación para un nuevo acuerdo nuclear entre el Irán y los Estados Unidos.
En un discurso virtual en el Diálogo de Manama del IISS, una cumbre de seguridad en el Medio Oriente, Pompeo defendió la campaña de "máxima presión" de Washington, que los opositores han criticado ampliamente por no cambiar el comportamiento de Teherán, mientras que aumentan las dificultades para el pueblo de Irán.
"Sabemos que nuestra campaña está funcionando porque ahora los iraníes están señalando desesperadamente su voluntad de volver a la mesa de negociaciones para obtener un alivio de las sanciones", dijo Pompeo. No dio detalles sobre las señales que ha visto Washington.
Pompeo advirtió que no hay que ser indulgente con Teherán.
"En el caso de que se sienten a la mesa y sólo estén dispuestos a hablar de apagar unas pocas centrifugadoras (nucleares) durante unos meses o unos años, el mundo no debería encontrar eso suficiente". ... No debemos interrumpir la negociación", dijo.
El presidente electo Joe Biden, que está previsto que asuma el cargo el 20 de enero, ha dicho que devolverá a Estados Unidos al acuerdo de la era de Obama si Irán reanuda el cumplimiento del acuerdo.
El principal enviado de EE.UU. a Irán, Elliott Abrams, hizo comentarios similares el jueves, diciendo que es poco probable que Irán tome represalias por el asesinato de un prominente científico nuclear antes de la toma de posesión de Biden, en caso de que ponga en peligro cualquier alivio de las sanciones futuras.