El Movimiento de Resistencia Islámica Hamas condenó el jueves las declaraciones del embajador de EE.UU. en Israel, David Friedman, en las que pidió a Tel Aviv "aumentar el ritmo de construcción de asentamientos".
El lunes, TV7 Noticias de Israel informó que Friedman pidió a Israel, durante una visita a la familia de un colono que fue encontrado muerto en Jenin hace 11 días, que acelerara el ritmo de construcción de asentamientos en Cisjordania en respuesta a su asesinato.
La colona Esther Horgen fue asesinada el 20 de diciembre, cerca del asentamiento de Tal Menashe, al norte de la Ribera Occidental.
El miembro de la Oficina de Relaciones Internacionales de Hamas, Basem Naim, afirmó en una declaración, de la que la Agencia Anadolu obtuvo una copia, que Friedman: "Confirma el enfoque de los EE.UU. que respalda al enemigo sionista contra el pueblo palestino".
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"Friedman es el embajador de un país poderoso, lo que le obliga a acatar el derecho internacional y rechazar el acuerdo, ya que constituye una violación del derecho internacional", añadió Naim.
Naim acusó al embajador de los Estados Unidos de: "Presionar para provocar más caos e inestabilidad, y reforzar la ley de la jungla".
Indicó que las declaraciones de Friedman constituyen: "Una violación directa de los derechos inalienables de nuestro pueblo."
El movimiento israelí de derechos humanos, Peace Now, confirmó que las actividades de asentamiento en los territorios palestinos ocupados se han duplicado durante la era del presidente estadounidense Donald Trump.
Los datos publicados por la organización demuestran que hay 661.000 colonos israelíes, 132 grandes asentamientos y 124 puestos de avanzada de asentamiento aleatorios (no autorizados por el gobierno israelí) en Cisjordania, incluyendo Jerusalén Oriental, a finales de noviembre.