La Autoridad Palestina (AP) pidió el domingo a la administración estadounidense que intervenga para detener las provocaciones israelíes en la Jerusalén Oriental ocupada, informa la Agencia Anadolu.
Decenas de colonos israelíes entraron el viernes por la fuerza en el recinto de la mezquita de Al-Aqsa, en Jerusalén Este, por primera vez en tres semanas.
En declaraciones citadas por la agencia oficial de noticias Wafa, el portavoz de la AP, Nabil Abu Rudeineh, dijo que "el apoyo israelí a los colonos extremistas equivale a un flagrante desprecio de los esfuerzos árabes e internacionales para detener la agresión [israelí]."
Advirtió que "las restricciones y el asedio israelíes al barrio de Sheikh Jarrah, en Jerusalén, y las continuas incursiones en el recinto de la mezquita de Al-Aqsa podrían arrastrar la situación de nuevo a la escalada y las tensiones."
Abu Rudeineh responsabilizó a Israel de sabotear los esfuerzos de Estados Unidos y Egipto "para estabilizar el alto el fuego y preparar la reconstrucción de la Franja de Gaza".
La tensión se intensificó en los territorios palestinos desde el mes pasado debido a la sentencia de un tribunal israelí de desalojar a familias palestinas de sus hogares en el barrio de Sheikh Jarrah en favor de grupos de asentamientos. La situación empeoró después de que las fuerzas israelíes asaltaran la mezquita de Al-Aqsa y agredieran a los fieles que se encontraban en su interior.
La tensión se extendió a la Franja de Gaza, donde Israel lanzó ataques aéreos que causaron la muerte de al menos 248 palestinos, entre ellos 66 niños y 39 mujeres, e hirieron a más de 1.900 personas. Las autoridades sanitarias de Cisjordania también confirmaron la muerte de 31 personas en el territorio ocupado, lo que supone un total de 279 en todos los territorios palestinos.
Trece israelíes murieron también por el lanzamiento de cohetes palestinos desde la Franja de Gaza. Los combates, los más feroces en años, se detuvieron el viernes en virtud de un alto el fuego mediado por Egipto.
Jerusalén sigue siendo el centro del conflicto palestino-israelí, ya que los palestinos esperan que Jerusalén Este, actualmente ocupada por Israel, pueda llegar a ser la capital de un futuro Estado palestino.