El Ministerio del Interior israelí se niega a tramitar las solicitudes de unificación familiar presentadas por hombres palestinos casados con ciudadanos israelíes, a pesar de que las autoridades de ocupación están obligadas por ley a considerar estas solicitudes tras la expiración de la Ley de Ciudadanía y Entrada en Israel.
Según Haaretz, la ministra del Interior, Ayelet Shaked, ordenó a la Autoridad de Población e Inmigración que no tramitara las solicitudes a la espera de la formulación de una política para gestionar este expediente. Esto se produce después de que el gobierno de coalición no haya conseguido prorrogar la ley temporal que regula la prohibición de las solicitudes de unificación familiar.
La orden temporal, que niega a los palestinos casados con mujeres israelíes el derecho a obtener el estado civil, se promulgó como enmienda provisional a la ley de ciudadanía durante la segunda Intifada en 2003, y desde entonces se ha prorrogado cada año. Sin embargo, el plazo de la ley expiró hace unas dos semanas, después de que el gobierno no consiguiera una mayoría en la Knesset para prorrogarla.
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La modificación de la Ley de Reagrupación Familiar restringió el derecho de las familias afectadas a unirse, permitiéndoles únicamente, como máximo, obtener un permiso de residencia temporal en Israel de acuerdo con sus autorizaciones de trabajo. En cualquier caso, los palestinos no pueden solicitar la unificación familiar antes de los 35 años, argumentando Israel que existen consideraciones de "seguridad", dadas las acusaciones de que muchos palestinos participaron en "actividades terroristas" tras obtener el permiso de unificación familiar.
Según el ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, "la ley es una de las herramientas diseñadas para garantizar una mayoría judía en el Estado de Israel, que no debe ocultar su esencia".
Mientras la orden temporal esté en vigor, cualquier solicitud presentada al Ministerio de Interior israelí será automáticamente rechazada, a menos que el ministro decida lo contrario. Una vez que expire el salvoconducto de unificación, la situación deberá invertirse, ya que cada solicitud deberá ser examinada por separado por el organismo de seguridad nacional. En caso de que la solicitud no genere ningún problema de seguridad, se aprueba automáticamente, a menos que el ministro del Interior decida lo contrario.
Muchas familias palestinas han solicitado a la Autoridad de Población e Inmigración que se eleven las autorizaciones a la ciudadanía plena para los menores de 35 años. Sin embargo, no han recibido ninguna respuesta. Las familias han amenazado con llevar a la autoridad a los tribunales.
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