El 5 de mayo, un ataque aéreo golpeó un campo de personas desplazas internamente (IDP) cerca de la ciudad de Sarmada, en el norte de Alepo, cerca de la frontera turca
La coalición condenó lo que describió como el “silencio de la comunidad internacional” frente a las violaciones de derechos en curso por parte del régimen de Assad , que, según declaran, es equivalente a la “complicidad” con los delitos de este último y “da luz verde para matar a la población siria”